Centro documental memoria historica
La historia es ahora: ¿cuál es la historia de américa?
Órgano de gobierno profesional de este Archivo, creado por el Real Decreto 1267/2006, de 8 de noviembre (BOE publicado el 9 de noviembre), con la participación del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte y las Comunidades Autónomas de Aragón, Cataluña, Valencia y Baleares.
Órgano colegiado que asesora la gestión del centro. Está formado por participantes del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, la Junta de Andalucía, el Ayuntamiento de Sevilla, el Consejo Superior de Investigaciones Científicas, las universidades sevillanas y personalidades del mundo de la cultura.
No hubo tiempo para la tristeza
La primera gran tarea del Museo de la Palabra y la Imagen fue salvaguardar los registros documentales de diferentes orígenes y en diversos formatos (audiovisuales, fotografías, manuscritos, artefactos…). A ello siguió un intenso programa de investigación, divulgación y debate sobre la historia y la cultura de El Salvador y la identidad de su pueblo.
Asociado a la labor iniciada por Radio Venceremos, la emisora del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) en Morazán, el Museo se inauguró en San Salvador al final de la guerra, en 1992. El objetivo inicial era preservar la memoria de las luchas sociales de los años 80, pero poco a poco se fueron ampliando sus objetivos y actividades. Hoy el museo es un referente fundamental en el panorama político-cultural de El Salvador, una herramienta para que los sectores populares reconstruyan su identidad y su lugar en la historia.
La memoria en la mochilaEntre 1980 y 1992, durante el conflicto armado en El Salvador, algunos guerrilleros del FMLN que trabajaban en comunicación, entre ellos Carlos Henríquez Consalvi -alias Santiago-, fundador y voz de Radio Venceremos y promotor y director del museo, ya reconocían la importancia de preservar la memoria de la lucha social en la que participaban. Comenzaron a llevar en sus mochilas casetes con todas las transmisiones de Radio Venceremos.
Memorias fronterizas en europa. renegociar el holocausto
Ninguna justicia parece posible o pensable sin el principio de alguna responsabilidad, más allá de todo presente vivo, dentro de lo que desliga el presente vivo, ante los fantasmas de los que aún no han nacido o ya están muertos, sean víctimas de la guerra, de la violencia política o de otro tipo.
8 En la mente de muchos españoles existía una relación directa entre los «excesos» políticos de los republicanos (como los llamaban los simpatizantes franquistas) y la Guerra Civil (entre otras cosas por la persistente propaganda franquista). Este vínculo percibido entre la República y la Guerra Civil hizo que muchos se cansaran de traer de vuelta los fantasmas de la Segunda República (Aguilar, 2008 : 234-235). Había reticencia a relacionar la naciente democracia con la República constitucional, ya que se temía que hacerlo podría reavivar el conflicto entre las «dos Españas». De hecho, el régimen democrático optó por no restaurar la bandera tricolor republicana (rojo/amarillo/morado) ni el himno nacional (Himno de Riego). En su lugar, la Constitución de 1978 conservó la tradicional bandera tricolor roja/amarilla/roja y el himno de la Marcha Real (ambos utilizados también bajo el franquismo). Como señala Francisco Erice Sebares, «[e]l hipotético consenso de la memoria pretransicional podría juzgarse, más que como un punto de encuentro, como un triunfo de la reelaboración de la ideología franquista de la memoria sobre una posible interpretación alternativa de los herederos de la tradición republicana» (2006 : 359, traducción mía). Tras la muerte de Franco, España se convirtió en la monarquía democrática constitucional del rey Juan Carlos I -antes de su muerte, Franco designó al joven príncipe como su sucesor con vistas a continuar el régimen.
Contra el olvido: memoria histórica y reconciliación justa
El Centro de Documentación de Camboya (DC-Cam) fue fundado por la Universidad de Yale y constituido en 1995 después de que el Congreso de Estados Unidos aprobara la Ley de Justicia sobre el Genocidio Camboyano en abril de 1994, que fue firmada por el Presidente Clinton. El Gobierno Real de Camboya también apoyó formalmente a DC-Cam. DC-Cam ha recibido numerosos elogios y premios por su trabajo en apoyo de la memoria y la justicia para las víctimas del genocidio camboyano. Solo en 2017, DC-Cam fue la destinataria de honor del Premio Judith Lee Stronach de Derechos Humanos del Center for Justice and Accountability, y su Majestad el Rey Norodom Sihamoni nombró a Youk Chhang Comandante de la Orden Real de Camboya en reconocimiento a los distinguidos servicios de Chhang al Reino de Camboya. En 2018, DC-Cam también fue galardonado con el premio Ramón Magsaysay, considerado el «Nobel de Asia», por preservar la memoria histórica para la curación y la justicia.> Nuestra historia
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