noviembre 28, 2024

Poesia de ruben dario

Poesia de ruben dario

Citas de rubén darío

Nacido en Nicaragua con el nombre de Félix García Sarmiento, Rubén Darío (1867-1916) es uno de los poetas latinoamericanos más famosos e influyentes. Generalmente se le atribuye el inicio del movimiento del modernismo, y ha tenido un profundo impacto en las letras latinoamericanas. En el mundo anglosajón, sin embargo, su recepción ha sido confusa por la falta de atención de la crítica y por traducciones que tienden a oscurecer la conmoción de su lenguaje en los albores del siglo XX.
Muchos traductores han insistido en intentar traducir algo de los esquemas de rima cuidadosamente construidos por Darío. Exigen que las traducciones al inglés se atengan a reglas formales similares, lo que obliga a contorsionar groseramente otros aspectos de la poesía. En consecuencia, no es raro ver traducciones de Darío en las que el fraseo y la dicción, e incluso las propias imágenes, han sido cambiadas por completo por el traductor.
Simón y White consiguen conservar un final de rima, pero al hacerlo pierden el poderoso impulso anafórico del inicio. Su versión suena casi como un extracto de una canción infantil. El poema de Darío, sin embargo, desarrolla una atmósfera más oscura y melancólica, donde el orden de la rima se rompe con una serie de imágenes fragmentadas.

Poesia de ruben dario del momento

En Argentina escribió para La Nación y en 1896 publicó Los Raros y Prosas Profanas, que conquistaron a importantes críticos para que apreciaran el modernismo. Sus posteriores libros de poesía, Cantos de Vida y Esperanza, El Canto Errante, Poema del Otono y Canto a la Argentina, consolidaron su reputación. El Poema del Otono, escrito en 1910, suele considerarse la mejor obra de Darío.
En una de las publicaciones, titulada Canciones de vida y esperanza, trata temas como la derrota de España en la guerra hispanoamericana, el imperialismo norteamericano y la solidaridad de los pueblos de habla hispana.

Rubén darío poemas famosos

– murió hace más de un siglo, pero su influencia en la poesía en español sigue siendo inmensa. Pablo Neruda, Federico García Lorca, Octavio Paz, César Vallejo, Gabriel García Márquez y Jorge Luis Borges, entre muchos otros, reconocieron su deuda. Borges declaró: «Darío fue un innovador en todo: en el tema, en el vocabulario, en la métrica, en la magia peculiar de ciertas palabras… Podemos llamarlo verdaderamente el Libertador».
Nació como Félix Rubén García Sarmiento en 1867, cerca de San Pedro de Metapa, a unos 90 kms de Managua, pero se trasladó de niño a la ciudad de León, donde se acercó tempranamente a la escritura, tanto de poesía como de periodismo, antes de trasladarse a los 14 años a Managua, y luego a El Salvador, donde encontraría padrinos e influencias útiles. En 1886 se trasladó de nuevo, esta vez a Chile -en ese momento un imán para los intelectuales del resto de América Latina por su estabilidad política-, donde trabajó como periodista, pero sufrió los prejuicios clasistas de las altas esferas de la sociedad chilena. Sin embargo, allí se publicaron sus primeros libros, como Azul

Poesia de ruben dario 2021

El poeta Rubén Darío nació en Nicaragua en 1867 y fue quizá uno de los mejores exponentes del movimiento literario del modernismo surgido a finales del siglo XIX y principios del XX. Criado por sus tíos en León, Darío asistió a varias escuelas y a temprana edad ya leía una gran variedad de libros. Escribió su primer poema en 1879, cuando sólo tenía 12 años, y un año después su soneto Rivas fue publicado en un periódico local.
Su talento para la poesía a tan temprana edad le convirtió en una celebridad de la época e incluso le ofrecieron financiación del erario público para ir a un colegio en Europa, algo que nunca se llevó a cabo, debido a diferencias políticas. En 1882, el joven Darío se trasladó a El Salvador, donde tuvo como mentor al poeta Joaquín Méndez. Aunque su celebridad continuó, los tiempos empezaron a cambiar y cayó en desgracia, contrayendo la viruela, y finalmente regresó a su país para recuperarse.
Se trasladó a la capital, Managua, y siguió trabajando en sus poesías, y también intentó escribir una obra de teatro, con poco éxito, antes de marcharse a Chile en 1886. Allí colaboró en algunas obras con escritores chilenos, pero fue objeto de discriminación y burlas por parte de la aristocracia que, a pesar de su floreciente fama, lo consideraba de baja cuna y grosero.