marzo 9, 2024

Gastroenteritis sintomas y duracion

Cuánto dura la gastroenteritis

En la mayoría de los casos, la gastroenteritis vírica no es perjudicial. Sin embargo, la gastroenteritis vírica puede resultar peligrosa si provoca deshidratación. Cualquier persona con signos o síntomas de deshidratación debe acudir al médico de inmediato. Una persona con deshidratación grave puede necesitar tratamiento en un hospital.
Los adultos también deben acudir al médico si no son capaces de beber suficientes líquidos o soluciones de rehidratación oral -como Pedialyte, Naturalyte, Infalyte y CeraLyte- para evitar la deshidratación o si no mejoran después de beber soluciones de rehidratación oral.
Si un bebé o un niño presenta signos o síntomas de gastroenteritis vírica, no dude en llamar al médico para que le aconseje. La diarrea es especialmente peligrosa en los recién nacidos y los lactantes, ya que puede provocar una deshidratación grave en sólo uno o dos días. Un niño con síntomas de deshidratación puede morir en un día si no se trata.
También hay que acudir al médico de inmediato si el niño presenta signos o síntomas de gastroenteritis vírica y es un bebé, ha nacido prematuramente o tiene antecedentes de otras enfermedades. También hay que buscar ayuda médica de inmediato si el niño no es capaz de beber suficientes líquidos o soluciones de rehidratación oral para evitar la deshidratación o si no mejora después de beber soluciones de rehidratación oral.

Síntomas de la gastroenteritis

La gastroenteritis hace que el revestimiento de la barriga o del intestino esté dolorido e hinchado (inflamado), por lo que no funciona correctamente. Suele estar causada por una infección vírica o bacteriana. Algunas personas se refieren a ella como una infección intestinal, una intoxicación alimentaria o una diarrea del viajero.
En el Reino Unido, aproximadamente una de cada cinco personas padece gastroenteritis cada año. Se puede contraer la gastroenteritis si se come o bebe algo que contenga bacterias, virus o parásitos. También puedes contagiarte de alguien que tenga la infección, o por tocar objetos y superficies que hayan tocado antes que tú.
Si tienes gastroenteritis, es posible que tengas un ligero malestar estomacal que puedes tratar en casa. Pero algunas personas, entre ellas las que tienen problemas de salud subyacentes, los bebés y las personas mayores, pueden desarrollar una diarrea y un malestar muy graves. Esto puede conducir a la deshidratación, que puede necesitar tratamiento médico.
En los adultos, los síntomas de la gastroenteritis pueden durar hasta una semana. Pero llama a tu médico de cabecera si no mejoran (o empeoran) después de dos días. Siempre hay que acudir al médico si se observa sangre en las cacas, por si hay una causa subyacente más grave, como el cáncer de intestino.

Tratamiento de la gripe estomacal

La gastroenteritis, también conocida como diarrea infecciosa y gastro, es una inflamación del tracto gastrointestinal -el estómago y el intestino-[8] Los síntomas pueden incluir diarrea, vómitos y dolor abdominal.[1] También puede haber fiebre, falta de energía y deshidratación.[2][3] Suele durar menos de dos semanas.[8] No está relacionada con la gripe, aunque a veces se la denomine «gripe estomacal».[9]
La gastroenteritis suele estar causada por virus,[4] pero las bacterias, los parásitos y los hongos también pueden causar gastroenteritis.[2][4] En los niños, el rotavirus es la causa más común de enfermedad grave.[10] En los adultos, el norovirus y el Campylobacter son causas comunes. [11][12] Comer alimentos mal preparados, beber agua contaminada o el contacto cercano con una persona infectada pueden propagar la enfermedad[2] El tratamiento suele ser el mismo con o sin un diagnóstico definitivo, por lo que no suelen ser necesarias las pruebas para confirmarlo[2].
La prevención incluye lavarse las manos con jabón, beber agua limpia, amamantar a los bebés en lugar de utilizar leche de fórmula[2] y eliminar adecuadamente los desechos humanos. La vacuna contra el rotavirus se recomienda como prevención para los niños[2][10] El tratamiento consiste en ingerir suficientes líquidos[2]. En los casos leves o moderados, esto suele conseguirse bebiendo una solución de rehidratación oral (una combinación de agua, sales y azúcar)[2] En los que son amamantados, se recomienda continuar con la lactancia materna. [En los casos más graves, puede ser necesario administrar líquidos por vía intravenosa[2]. También pueden administrarse líquidos por sonda nasogástrica[13]. Se recomienda la administración de suplementos de zinc en los niños[2]. En general, no se necesitan antibióticos[14], pero se recomiendan en los niños pequeños con fiebre y diarrea con sangre[1].

Síntomas de infección estomacal en adultos

La gastroenteritis suele estar causada por infecciones víricas que provocan vómitos y diarrea. Los virus se transmiten fácilmente de persona a persona. Para evitar el contagio es fundamental lavarse bien las manos con agua corriente y jabón.
La gastroenteritis viral es una infección común del estómago y los intestinos que provoca vómitos y diarrea. Puede estar causada por diferentes virus, como el rotavirus y el norovirus (antes conocido como virus tipo Norwalk). Hay muchas otras causas de gastroenteritis, como bacterias, toxinas, parásitos y algunas enfermedades no infecciosas.
Los principales síntomas de la gastroenteritis vírica son vómitos y diarrea acuosa. Otros síntomas pueden ser náuseas, fiebre, dolor abdominal, dolor de cabeza y dolores musculares. Puede seguir la deshidratación. Los síntomas pueden tardar entre uno y tres días en desarrollarse y suelen durar entre uno y dos días, a veces más.
No existe un tratamiento específico para la gastroenteritis vírica, salvo el reposo y la ingesta de mucho líquido. La mayoría de las personas se recuperan sin complicaciones. Sin embargo, la gastroenteritis vírica puede ser grave para los bebés, las personas con el sistema inmunitario debilitado y los ancianos.