marzo 9, 2024

Clara peeters museo del prado

Clara peeters pieza de desayuno

Clara Peeters (activa de 1607 a 1621) fue una de las pocas mujeres pintoras que trabajaron en la Europa moderna temprana, y una pionera en el campo de la pintura de bodegones. Sus elegantes cuadros muestran mesas con arreglos de diferentes tipos de alimentos, vasijas, animales y otros objetos.
Este libro ofrece el estudio más actualizado sobre su carrera y sus obras. Sitúa a la artista en el contexto cultural y artístico de Amberes, y llama la atención sobre el modo en que transformó las prácticas de coleccionismo y exhibición en arte. Las pinturas de Clara Peeters también reflejan la cultura material de la época en Europa. Los textos de este libro exploran los significados que los contemporáneos asociaban a productos alimenticios como el pescado, el queso, las alcachofas o las tartas, a las conchas exóticas y a la porcelana Wanli, así como a las aves de rapiña y otros animales.
También se estudian las posibilidades y limitaciones a las que se enfrentaban las mujeres artistas a finales del siglo XVI y principios del XVII debido a los prejuicios generalizados. La voluntad de Clara Peeters de ser reconocida como mujer pintora se manifiesta en los pequeños autorretratos que existen reflejados en las brillantes superficies metálicas de las vasijas en varios de los cuadros reproducidos en este libro.

Frida kahlo

Han tenido que pasar casi 200 años para que el Museo del Prado de Madrid, el museo nacional de arte de España, monte su primera exposición individual dedicada a una mujer artista.  Hoy se ha inaugurado El arte de Clara Peeters, una exposición individual con 15 obras de la pionera pintora de bodegones del Siglo de Oro holandés; el Prado celebrará su bicentenario en 2019. Como señala Hannah McGivern, del Art Newspaper, que ha señalado esta primicia tan tardía, Peeters es una de las 41 mujeres representadas en la colección del museo -que posee cuatro de las obras de la exposición-, frente a sus fondos de obras de más de 5.000 artistas masculinos.
Un estudio de los últimos 13 años de exposiciones en el Prado confirma lo que parece un sorprendente sesgo de género para un museo que funciona en el siglo XXI. Si bien esta exposición de Peeters parece tener 197 años de antigüedad, desde 2003 la institución ha montado seis exposiciones dedicadas a Francisco Goya, cuatro a El Greco y tres a Diego Velázquez, Tiziano y Picasso (este último, cabe señalar, fue director del museo de 1936 a 1939). En el mismo periodo, las siete incursiones del Prado en el arte contemporáneo han sido también exposiciones individuales de hombres, como Francis Bacon, Cy Twombly, Richard Hamilton y Thomas Struth.

Bodegón con quesos, alcachofa…

En el último número del Boletín del Museo del Prado se incluye un nuevo artículo sobre Clara Peeters. Finding Clara, de Jean Bastiaensen, es uno de los primeros artículos que arrojan luz sobre la vida de esta pintora de Amberes.
El análisis de la bibliografía existente y el estudio de piezas de archivo sin explotar han permitido descubrir que Clara Peeters podría ser una tal Clara Lamberts, nacida en la tercera generación de una familia de pintores de Malinas hacia 1587, y que posteriormente se convertiría en la esposa del pintor Henrick II Peeters. La autora ha encontrado posibles pruebas de que su estudio pudo estar en Amberes, donde pintó la mayoría de sus obras. Lo más probable es que Clara Peeters-Lamberts muriera en Gante después de 1636.

Clara peeters

Clara Peeters fue una pionera del bodegón, una de las únicas mujeres flamencas que pintó exclusivamente bodegones. Fue contemporánea de Rubens, Van Dyck y Jan Brueghel el Viejo, y como tal, estuvo activa durante uno de los grandes períodos del arte europeo. A Peeters se le atribuye la popularización de las obras de banquetes o desayunos llenos de color, que representan suntuosos despliegues de vajilla, copas, comida, bebida y flores, en la tradición pictórica holandesa. Es conocida por su pincelada meticulosa, su capacidad para captar texturas precisas y su bajo ángulo de perspectiva.
Aunque las costumbres y las leyes no favorecían la inclusión de las mujeres en las actividades profesionales, un pequeño número de ellas pudo superar las restricciones existentes y convertirse en pintoras. Factores como el problema de estudiar los dibujos anatómicos de modelos vivos, normalmente masculinos, que posaban desnudos en una actividad estaba prohibida para las mujeres y, por tanto, limitaba su trabajo a los retratos o a las pinturas de bodegones.
Hay muy poca documentación sobre la vida de Clara Peeters, aparte de sus pinturas. Los estudiosos creen que nació entre 1588 y 1590. Aunque un registro indica que una Clara Peeters fue bautizada en Amberes en 1594, tanto Clara como Peeters eran nombres comunes. Un bautismo en 1594 implicaría que sus sofisticadas pinturas de 1607, las primeras obras fechadas conocidas, fueron realizadas cuando tenía trece años, lo que parece poco probable. Hacia 1612, Peeters producía un gran número de bodegones minuciosamente realizados. No se conoce ninguna obra suya más allá de 1621; tampoco se conoce la fecha de su muerte.